Algunas personas creen que tanatorio y velatorio son dos terminologías que se utilizan para referirse al mismo lugar, pero no es así, un velatorio es una sala especial que está acondicionada para velar a los difuntos y pueden acudir sus familiares para despedirse de ellos. Mientras que un tanatorio es un edificio donde se realizan procesos funerarios. En un tanatorio puede haber varios velatorios en función de las salas que tengan.
Un tanatorio es un lugar preparado para realizar toda la logística necesaria y preparación de un difunto antes de un entierro o incineración. Se realizan también servicios adicionales como arreglos florales, venta de féretros y urnas y en algunas ocasiones la incineración (si el tanatorio cuenta con las instalaciones necesarias). Este tipo de infraestructuras se comenzaron a utilizar en España en 1970, anteriormente se velaba a los difuntos en los domicilios. Los tanatorios de Funersierra se rigen siempre por la política sanitaria mortuoria que abarca el control y vigilancia de toda clase de prácticas sanitarias relacionadas son los cadáveres y restos cadavéricos, así como asegura las condiciones técnico-sanitarias de los féretros, cementerios, urnas y el resto de elementos que se utilizan durante el proceso.
Los tanatorios se componen de túmulos funerarios, cámaras y salas de preparación y servicios complementarios opcionales como capillas, salas, cafetería, WIFI, restaurante, servicio de catering, servicios de floristería. En Funersierra contamos con todos estos servicios detallados en el artículo “Funersierra garantiza un completo catálogo de servicios funerarios”. Si desea saber más información sobre el servicio de catering en Funersierra, le animamos a leer el artículo “FunerSierra abarca el catering más variado del sector funerario”.
A modo de recordatorio, el velatorio es una sala dedicada para velar al difunto dentro de un tanatorio. Las denominadas “salas de vela” están equipadas con mobiliario específico, como sofás y cuenta con un espacio para exponer el féretro a través de un cristal. El velatorio finaliza tras 24 horas como mínimo para poder incinerar o enterrar el cuerpo. Es posible que las familias estén más tiempo velando el cuerpo, pero nunca menos. Cabe mencionar, además, que, si se trata de una persona destacada en una comunidad, en un grupo o incluso alguien conocido, el cuerpo se puede velar en un espacio público. A este tipo de salas de velatorios públicos se las conoce como capilla ardiente. Además del acondicionamiento del difunto, Funersierra ofrece durante este momento música en directo entre otros servicios para despedir al fallecido. También contamos con espacios de apoyo habilitados con personal formado en psicología para que ayuden a los familiares que lo necesiten a reponerse y pasar el duelo lo mejor posible.