Con más de 20 años de experiencia en el sector funerario, Funersierra demuestra su ambición ofreciendo un servicio de traslados nacionales e internacionales. Localizada en el municipio madrileño de Majadahonda, nuestra empresa quiere ir más allá y los desplazamientos fuera de España son cada vez más frecuentes.
Cuando una persona fallece lejos de su domicilio o del lugar de residencia de su familia, es usual que sus seres queridos deseen que descanse lo más cerca posible de ellos. Esto conlleva la necesidad de hacer traslados nacionales o internacionales de los restos del difunto. Una gestión que Funersierra intenta hacer de la manera más sencilla.
Si una familia quiere que su ser querido descanse en un lugar diferente de donde se ha producido el fallecimiento puede optar por incinerar el cuerpo previamente al viaje o transbordar el féretro para su inhumación en el cementerio de destino.
Si se inclina por la cremación, hay que tener en cuenta que las cenizas pueden viajar por toda España sin ninguna acreditación o trámite previo. Únicamente habrá que notificar la presencia de la urna en los viajes aéreos por motivos de seguridad. En cambio, el traslado nacional de féretros supone cumplir con los requisitos legales de cada autonomía. Desde Funersierra asesoramos a las familias y nos ocupamos de todos los trámites para agilizar este procedimiento.
Por su parte, los traslados internacionales o repatriaciones implican llevar el cuerpo de una persona que ha fallecido a su país de origen. Pueden solicitarlos la familia, el consulado o la aseguradora, y lo más asiduo es que se hagan en avión.
Traslados funerarios en Madrid y Majadahonda: Funersierra se encarga de gestionar los trámites
Funersierra se responsabiliza de la tramitación de la solicitud de un traslado internacional y, si fuera necesario, contactaría con una gestoría especializada en tramitación internacional. Para llevarse a cabo esta solicitud, es ineludible contar con los siguientes documentos: solicitud de la familia, pasaporte del difunto, certificados médicos de fallecimiento, títulos exactos de defunción, permiso original de inhumación, acta de embalsamamiento, carta consular, filiación del difunto, aeropuerto y cementerio de destino y la persona responsable del difunto en el destino.
Con todos estos datos y la documentación difundida por el organismo de sanidad conveniente en el lugar de fallecimiento, Funersierra desarrollará todo el procedimiento de repatriación que puede durar, como máximo, una semana.
Por otro lado, si ha habido una incineración previa, un familiar o allegado puede hacerse cargo de las cenizas en el lugar de la defunción. Para superar el trámite de aduanas, Funersierra le proporcionará todas las gestiones de repatriación y los certificados originales de fallecimiento y de incineración.
Como se puede imaginar, un traslado internacional es más caro que uno nacional. No obstante, Funersierra abarata el precio mientras más cerca esté de Madrid en ambos casos. Por ejemplo, será más económico si el traslado se hace a Cuenca que a Barcelona en el caso nacional y más rebajado si se efectúa a Europa que a Asia en el supuesto internacional. Como en todos nuestros servicios, nos adaptamos a las necesidades de nuestros clientes.
Lo mismo sucede con el transporte. Es una obviedad, pero conviene recordarla. Saldrá más barato hacer un traslado desde un coche que desde un avión. De todos modos, si persisten sus dudas, estaremos encantados de ayudarles, ya sea por teléfono (91 330 91 30) o por correo electrónico (informacion@funersierra.com).